Almara es una experiencia terapéutica en línea que comienza con la apertura de tus Registros Akáshicos y continúa, pocos días después, con una sesión individual por videollamada en la que aterrizamos junt@s la información recibida, desde la comprensión, el amor y el alma.
Canalizaré información precisa, amorosa y profundamente transformadora relacionada con el momento vital que estás atravesando. Esa información no viene de mí, sino de tus guías y de tu Yo Superior. A través de esta apertura, pueden revelarse aspectos transgeneracionales (epigenéticos), memorias de vidas pasadas, bloqueos energéticos que no sabías que estaban interfiriendo tu avance, síntomas físicos con un origen emocional inconsciente, o incluso la presencia de entidades adheridas u otras frecuencias sutiles que estén afectando tu bienestar.
Desde el instante en que decides dar el paso de enviarme tus datos y tu pregunta, la energía comienza a moverse. Tu campo cuántico se activa, y junto con la canalización, la sanación cuántica empieza a desplegarse. Ese primer “sí” no es solo simbólico: es real, energético, profundo. Ya estás entrando en tu propio proceso de transformación. Y ese movimiento no se detiene: llega al inconsciente, ilumina lo que estaba oculto y abre camino para lo nuevo.
El único contacto inicial que voy a tener contigo será el formulario donde me envíes tus datos y una sola pregunta. No necesito explicaciones, historias ni detalles previos. Este espacio de neutralidad me permite llegar en blanco a tus registros y canalizar con la mayor pureza y fidelidad posible. Puedes indicar en qué área necesitas claridad (relaciones, salud, economía, propósito...), o simplemente dejar que tus guías te muestren lo que hoy es prioritario. A veces llegamos con una inquietud y los guías nos entregan algo más profundo que estaba oculto.
Yo no decido cuándo abrir tus registros. Es tu Yo Superior, junto con tus guías, quien indica el momento perfecto. Puede que lo haga al día siguiente… o que pasen varios días hasta que la energía esté preparada en ti. Durante ese tiempo es común que sientas movimientos internos, emociones o sueños. Todo es parte del proceso.
Recibirás la información en pequeños audios por WhatsApp o por escrito en tu correo electrónico. Tanto en español o en inglés, dependiendo de tu preferencia.
Al cabo de unos días (entre dos y cuatro), nos encontraremos por videollamada en una sesión terapéutica online de aproximadamente una hora. Al igual que la información de tu Registro Akáshico, el idioma será en español o en inglés dependiendo de tu preferencia.
Te recomiendo que escuches o leas la canalización varias veces antes de ese encuentro. A veces no captamos todo en la primera escucha, y en la tercera o cuarta vuelta comienzan a revelarse otras capas. Anota lo que resuene, lo que te duela, lo que no entiendas. Pregúntate qué te está mostrando esa información. Escribe tus dudas, tus intuiciones, tus emociones… Todo será útil en la sesión.
Ese encuentro no es una simple conversación. Antes de que te conectes, yo ya estaré en estado de conexión y canalización, recibiendo información adicional si es necesario. En la sesión, podrás compartir tus preguntas y tu sentir. Junt@s exploraremos lo que ha surgido, y en función de lo que tu alma necesite, podemos realizar biodescodificación, canalización directa, liberación energética o simplemente acompañarte a comprender y asimilar lo que ha emergido.
Esto sí es magia.
Desde la mirada espiritual y chamánica, la magia es la capacidad de transformar la realidad cuando actúas en sintonía con tu alma, con intención, amor y conciencia. Eso es lo que ocurre en este espacio. Pero esa magia no sirve de nada si no hay compromiso. Porque por muy poderosa que sea la información que recibes, si no la integras, si no la sostienes con acciones concretas, puedes bloquearla y volver al mismo punto.
Es como recibir una antorcha para iluminar tu camino... pero decidir seguir caminando a oscuras.
Nada da más miedo que mirarse a un@ mism@. Y nada es más valiente que hacerlo.
Pide información. Escríbeme. No te quedes con la duda.
Estoy aquí para orientarte y ayudarte a discernir si el camino que más te acompaña ahora es Almara o el Método MAP.
Tú solo tienes que dar el primer paso.
Lo demás, empieza a suceder.