Hace ocho años empecé a notar una presencia extraña en casa, la situación duró varios meses. Soy una persona mayor y vivo sola, así que al principio, aunque me sorprendía ver pasar una sombra por el pasillo cada noche mientras estaba en la cama viendo la tele, no me daba miedo. Incluso le hablaba, le decía: “Camarupa, ¿qué quieres?” La sentía, pero no me daba miedo.
Con el tiempo, la cosa fue cambiando. Empecé a sufrir empujones muy fuertes. Me tiraba al suelo y me arrastraba hasta tres o cuatro metros de donde estaba. Esto no pasó una sola vez: entre ocho y diez veces, en distintas ocasiones, me vi en el suelo sin entender cómo había acabado tan lejos. Y cada vez que ocurría, me hacía daño: en la espalda, en la cadera… hasta que una noche me di en la cabeza y me salió un chichón enorme. Ahí sí me asusté de verdad. No por la sombra en sí, sino porque físicamente podía hacerme daño serio. Pero claro, ¿a quién se lo cuenta una?
Cuando se lo conté a Mariola, ella intervino. Se dio cuenta de lo que era y llevó a ese ser a la luz. Desde ese momento, no volvió a pasar nada más. Todo quedó en calma. No he vuelto a ver ni sentir nada, y la paz que siento desde entonces es total.
Mari Carmen Pisón, 83 años, España
Mi experiencia con Mariola en la lectura de mis Registros Akáshicos fue muy sanadora y transformadora.
Desde el primer momento, su energía me transmitió paz, confianza y un gran respeto por mi proceso.
Las respuestas que recibí a través de su canalización fueron claras y llegaron justo al corazón de lo que necesitaba comprender, mis portales tan abiertos a lo sutil. Mariola no solo abrió una puerta a información valiosa para mi crecimiento, sino que lo hizo de una forma amorosa, sin juicios y con una gran sensibilidad.
Gracias a su acompañamiento, pude reconocer y abrazar partes de mí que necesitaban ser vistas.
Recomiendo plenamente su trabajo a quien desee reconectarse consigo mismo y encontrar de cierta manera una guía en el camino.
Dani 30 años, México
Tuve la oportunidad de realizar mis Registros Acáshicos; la cual para mí fue redescubrir mi interior y personalidades ocultas que con las vidas anteriores que salieron descubrí el por qué de mis actitudes y comportamientos. Mariola me hizo comprender y filtrar los acontecimientos de mis vidas pasadas para poderlos aplicar en mi actual vida. Es un renacer con conciencia; definitivamente recomendable la guía y el despertar de tu vida.
Gracias Mariola por tu experiencia y guía.
Sol, Mexicana 49 años
Contacté a Mariola porque compré una casa que tenía vibras negativas muy extrañas, sombras raras y una sensación de tristeza. En menos de 24 horas, Mariola limpió por completo la casa de todas esas energías negativas y se sintió completamente diferente. Ahora estoy muy feliz en la casa.
Aparentemente, es común en Ajijic y en general en la Ribera de Chapala que las casas tengan estos problemas porque muchas han sido construidas sobre lugares donde fueron enterrados pueblos indígenas.
Si sientes algo raro, Mariola puede ayudarte.
Janet. 77 años, Canadá.
Quería armonizar mi casa, no quería sentir más esas presencias obscuras y me angustiaba la forma en que se inquietaba mi Niño. Hoy estoy muy agradecida por el proceso que trabajé con Mariola y al fin quedó limpio nuestro espacio .
Así como descubrir más aspectos profundos en mi vida para sanar, para avanzar y fluir en paz., es como un renacer…. Gracias de corazón Mariola, por toda la paciencia y entrega en este proceso. Las bendiciones se multiplican.
Adriana, 44 años, México
Mariola, fue un regalo haber tenido la oportunidad de conectar con mi mejor amigo en su lecho de muerte a través de ti, él estando completamente inconsciente, intubado y tú sin haberlo conocido de antes, de nada. Fue impresionante sentir sus palabras en tu voz, y únicamente viviendo una experiencia así es que cualquier incrédulo comienza a creer, eres mágica y un maravilloso canal para explicar lo inexplicable, nos diste muchas respuestas a nuestras preguntas y solo puedo decirte gracias, agradezco mucho haberte conocido, un abrazo.
Kathia 41 años, México
He tenido dos sesiones con Mariola Arteseros, y ambas han sido profundamente conmovedoras y transformadoras.
La primera sesión fue una conexión con mis abuelas — un trabajo de sanación ancestral que abrió algo muy profundo dentro de mí. Ella canalizó la energía de mi abuela materna de una forma tan clara que la vi reflejada en su presencia. El mensaje que me transmitió fue el más hermoso que he recibido, no solo para mí, sino para todas las mujeres de mi familia:
“Ama como yo no pude haber amado.”
Ese mensaje transformó algo en mi interior. Trajo paz, claridad y sanación en lugares donde ni siquiera sabía que había dolor. Desde esa lectura, mi relación con mi madre ha florecido como nunca antes.
En la segunda sesión pedí guía sobre este nuevo comienzo — mudarme de nuevo a mi lugar de origen y reconstruir mi vida. Su lectura me ayudó a confiar en el proceso, incluso cuando el camino cambia.
Estoy profundamente agradecida por su don, su integridad, y su capacidad de canalizar mensajes que sanan a través de generaciones. La recomiendo con todo mi corazón.
Índigo, 38 años (EE.UU)
“Quiero expresar mi más profunda gratitud por la hermosa sesión de Registros Akáshicos-Almara que tuve con contigo. Fue una experiencia profundamente sanadora y reveladora. Gracias a tu guía amorosa y clara, pudimos identificar y liberar bloqueos que venían de la línea materna de mi familia. Esto me ha ayudado a tomar conciencia de patrones que ya no me sirven y que sin darme cuenta estaba repitiendo.
Me siento mucho más ligera, con una nueva comprensión de mi historia familiar y de mí misma. Tu presencia fue cálida, compasiva y muy intuitiva. Sentí que estabas verdaderamente conectada y que el espacio que creaste fue seguro y sagrado.
Gracias, de corazón, por tu ayuda. Recomiendo tu trabajo a cualquier persona que esté lista para sanar, liberar y comprender su camino desde una perspectiva más profunda y espiritual. ¡Eternamente agradecida!”
Valerie, 55 años, Atlanta, USA
Mi experiencia con Mariola en terapia ha sido reveladora. Ella es un ser de luz, sensible. Es como el vínculo entre lo humano y lo divino, que puede ver más allá de lo que alcanza la vista. Una guía espiritual que te da las herramientas necesarias para resolver situaciones que venimos arrastrando y que no nos dejan avanzar. Qué afortunada soy de haberla encontrado en el camino. Eternamente agradecida.
Cristina 58 años, Venezuela